Copiar, Compartir, Remezclar...Pensar!!!

Una vez realizadas las lecturas propuestas sobre la cultura de compartir, remezclar, copiar, colaborar....y la cada vez más frecuente idea de tener que sacarle el mayor rendimiento económico posible a todo lo que hacemos, lo primero que me viene a la cabeza es que cierto sector de la sociedad pretende aumentar su status económico y de poder introduciendo leyes y normativas cada vez más restrictivas para la mayor parte de la ciudadanía con la excusa de proteger los derechos de autor y el esfuerzo que ese autor ha realizado para desarrollar su obra. Podría estar de acuerdo con esta tendencia que está teniendo la sociedad si no fuera porque todos los días vemos como se copian constantemente las ideas que otros desarrollan. En televisión, todas las cadenas tienen programas con el mismo formato, los coches presentan diseños parecidos, los bancos los mismos productos... En definitiva, que el copiar y el basarse en ideas de otros está a la orden del día.

Este hecho, además, es fundamental en el desarrollo humano. Todos hemos imitado comportamientos de otros compañeros, todo gran invento se ha basado en otra idea para llegar a ella, incluso los gobiernos copian e imitan decisiones y sistemas tomadas por otros gobiernos. Copiar, remezclar,... no es el problema. El problema es cómo.

La mayor virtud del ser humano es su capacidad de pensamiento. Eso es lo que debe mover el mundo, personas que crean, modifican y mejoran ideas. Suyas o de otros. El poder económico de hoy en día pretende que pensemos lo justo. Lo justo para dotar de más poder económico al que ya lo tiene de forma que el resto tenga que someterse a sus directrices. Precioso exponente de esta idea es el video de Ken Robinson. Este hombre también basa su idea de cambio en otra idea. ¿Es eso plagio? ¿Debería pagar derechos de autor por ello? ¿Dónde está el límite? Como siempre, el límite esta en la propia naturaleza humana, en cómo utlizamos los recursos disponibles y en los valores que tenemos interiorizados.

Todo esto siempre ha existido, la diferencia es que ahora con un corta-pega se hace muchísimo más fácil. Hemos mejorado muchísimo en velocidad. Ahora va siendo hora de otro tipo de mejoras.